Detectar algas en tu piscina puede ser frustrante y arruina cualquier momento de baño. En Ruberte Piscinas sabemos que eliminarlas a tiempo y evitar su retorno es clave para mantener el agua cristalina y segura. Esta guía, con respaldo técnico y experiencia real, te explica paso a paso qué hacer si aparecen algas verdes, negras o amarillas, cómo tratarlas eficazmente y cómo evitar que vuelvan.

Antes de actuar, debes identificar:

  • Tipo de algas:
    • Verdes: las más comunes, hacen el agua turbia.
    • Negras: se adhieren y penetran en superficies.
    • Amarillas (mostaza): aparecen en zonas sombreadas y son muy resistentes al cloro.
  • Parámetros químicos: pH entre 7,2 y 7,6; cloro libre entre 1–3 ppm (si es líquido) o 2–4 ppm (si usas bromo).
  • Estado del filtro y circulación: revisa presión, limpieza y funcionamiento continuo (al menos 8 h/día).
  • Elimina residuos (hojas, arena) con red.
  • Cepilla intensamente paredes y fondo para desprender algas adheridas.
  • Aspira los depósitos antes de aplicar productos químicos, atractivos al tratamiento.
  • Asegura el pH correcto (ideal cerca de 7,0).
  • Prepara cloro rápido (dicloro) disuelto en agua tibia (unos 40 °C) para evitar manchas en el revestimiento.
  • Distribuye uniformemente con la bomba en marcha.
  • Filtra al menos 24–48 h. Si la presión aumenta, haz retrolavado.
  • Tras la cloración, añade alguicida de acción rápida o prolongada según el tipo de alga.
    • Usa algicidas líquidos de amplio espectro y sin espuma. Ejemplos: BetterPool, EQM, Klep o Tamar.
  • Dosis recomendadas:
    • Alta infestación: 600 ml por 10 m³
    • Mantenimiento: 200–300 ml por 10 m³
  • Mantén pH entre 7,0 y 7,4.
  • Filtra continuamente durante 24–48 h tras tratamiento.
  • Limpia el filtro o realiza retrolavado al notar exceso de presión.
  • Si usas cartucho, límpialo o cámbialo si está obstruido.
  • Aspira con limpiafondos manual o robot profesional todos los restos.
  • Cepilla de nuevo si aparecen algas remanentes.
  • Revisa y limpia skimmers, boquillas y accesorios.
  • Monitorea frecuentemente niveles de cloro, pH y alcalinidad. Ajusta si es necesario.
  • Filtración diaria: mínimo 8 h en verano/uso frecuente.
  • Limpieza semanal: cepillado y aspirado.
  • Skimmer limpio: vacía las cestas regularmente.
  • Aplica alguicida preventivo semanal o quincenalmente.
  • Control de fosfatos: estos nutrientes fomentan el crecimiento de algas. Reduce su presencia si detectas proliferaciones frecuentes.
  • Protección solar: usa cobertores cuando no se usa la piscina. Reduce la exposición a radiación UV que favorece las algas.

Actuar a tiempo ante una proliferación de algas permite ahorrar productos, tiempo y evitar daños permanentes en el revestimiento. En Ruberte Piscinas, contamos con experiencia y productos profesionales para:

  • Diagnóstico avanzado del tipo de alga y estado del agua.
  • Tratamientos de choque y algicidas certificados.
  • Limpieza mecánica, filtración intensiva y profesional.
  • Programa de prevención personalizado.

¿Algas persistentes o problema recurrente? ¡Contáctanos! Te ayudamos con protocolo profesional, equipos y mantenimiento personalizado para mantener siempre tu piscina limpia y cristalina.