En Ruberte Piscinas, una de las preguntas más frecuentes que recibimos es: “¿cuándo hay que cambiar la arena del filtro de la piscina y cómo se hace?”. Y no es para menos: el filtro es uno de los componentes esenciales del sistema de depuración del agua, y la arena que contiene es la responsable de retener las impurezas y mantener el agua cristalina.

En este artículo te explicamos de forma sencilla cada cuánto tiempo debes cambiar la arena, cómo hacerlo paso a paso y qué señales indican que ya es hora de hacerlo. Además, te damos consejos útiles si estás pensando en pasarte a otros medios filtrantes.

Como norma general, la arena del filtro debe cambiarse cada 4 a 5 años. Sin embargo, este plazo puede variar en función de varios factores:

  • Calidad del agua de llenado (más o menos calcárea).
  • Horas de funcionamiento diario del sistema.
  • Uso de productos químicos.
  • Mantenimiento regular del filtro (lavados y enjuagues).

Si la arena está apelmazada, el agua se pone turbia más rápido o notas pérdida de presión en el sistema, probablemente ha llegado el momento de cambiarla.

  • Lavados cada vez más frecuentes sin mejora de la calidad del agua.
  • Agua verde o turbia a pesar de tener cloro correcto.
  • Presión alta constante en el manómetro incluso tras el lavado.
  • Arena apelmazada o con mal olor al abrir el filtro.
  • Formación de canales en la arena: el agua pasa sin filtrar correctamente.

Cambiar la arena del filtro es una tarea sencilla si se siguen los pasos adecuados. Desde Ruberte Piscinas te lo explicamos de forma clara:

  1. Apaga la depuradora y cierra todas las válvulas.
  2. Abre el filtro retirando la tapa superior.
  3. Retira la arena vieja con una aspiradora industrial o manualmente con una pala pequeña.
  4. Revisa los colectores del fondo, asegurándote de que no estén rotos.
  5. Llena el filtro con agua hasta cubrir los colectores (para amortiguar el impacto al verter la arena nueva).
  6. Introduce la arena nueva lentamente, respetando la cantidad indicada por el fabricante.
  7. Cierra el filtro, abre las válvulas y realiza un lavado y enjuague antes de pasar a filtración.

Cada vez más propietarios optan por medios filtrantes alternativos como:

  • Vidrio filtrante, que dura hasta 10 años, mejora la calidad del agua y necesita menos lavados.
  • Zeolitas, con gran capacidad de absorción de amoníaco y otros contaminantes.

Cambiar la arena del filtro es clave para mantener tu piscina limpia, segura y en perfecto estado. No esperes a que el agua se enturbie o a que el filtro deje de rendir como debería.

Si necesitas ayuda profesional, en Ruberte Piscinas nos encargamos del cambio de arena, revisión de filtros y mejoras del sistema. Solicita tu revisión sin compromiso y asegura el verano perfecto.